Invertir en Inteligencia Artificial desde Chile
En este BTG Webinar exploramos las posibilidades de inversión en el campo de la inteligencia artificial, una nueva tendencia dentro de la digitalización acelerada que estamos viviendo.
Hace 2 años
La inteligencia artificial comienza a consolidarse como uno de los principales motores de los mercados financieros, en un contexto en que los activos de mayor riesgo muestran un desempeño mejor al esperado. La renta variable global acumula avances relevantes en dólares, apoyada por una inflación que modera su ritmo, un mercado laboral robusto y utilidades corporativas que sorprenden al alza. Dentro de este escenario, el sector tecnológico destaca como el principal impulsor de los retornos, con una fuerte concentración en un grupo reducido de compañías que han liderado el desempeño bursátil desde el lanzamiento masivo de soluciones de IA generativa.
Más allá del ciclo económico, la inteligencia artificial se perfila como una tendencia estructural de largo plazo, comparable a otros grandes cambios en plataformas computacionales. Cada salto tecnológico relevante ha coincidido históricamente con aumentos de productividad y mejores retornos del mercado accionario, y la IA aparece hoy como el próximo catalizador de ese proceso. Su adopción masiva está modificando la forma en que empresas y personas trabajan, toman decisiones y procesan información, impulsando una demanda sin precedentes por capacidad de cómputo, centros de datos y semiconductores avanzados.
En ese contexto, el mayor impacto económico se concentra en la infraestructura que permite que la inteligencia artificial funcione. El desarrollo de modelos, aplicaciones y servicios requiere una inversión creciente en hardware especializado, particularmente en chips de alto rendimiento, lo que ha llevado a una fuerte concentración de valor en un número limitado de compañías clave dentro de la cadena global de semiconductores. Las barreras de entrada técnicas y de capital son cada vez más altas, lo que refuerza el carácter estratégico de esta industria y su relevancia tanto desde el punto de vista económico como geopolítico. Para los portafolios de inversión, la inteligencia artificial se posiciona así como una temática de largo plazo, capaz de aportar crecimiento y diferenciación, aunque con la volatilidad propia de una transformación tecnológica en pleno desarrollo.