
BTG vuelve a la carga: ficha a ex corpbanca en área comercial para relanzar banco
Hace 8 años
BTG vuelve a la carga: ficha a ex CorpBanca en área comercial para relanzar banco
Tras la autorización de la SBIF al cambio de control en Brasil, se retomará la idea de que tanto la AGF como la corredora se conviertan en filiales del banco. De este modo, aumentará su capital y así su capacidad crediticia.
MAXIMILIANO VILLENA
-Corrían los últimos días de 2016 y los primeros de 2017 cuando Fernando Massú se reunía con algunos de los principales inversionistas y agentes del sistema financiero del país. El presidente de BTG Pactual Chile se encontraba en pleno roadshow para relanzar el banco, el cual vio su crecimiento retrasado ante los ruidos provenientes de su cúpula brasileña. A pocos meses de las reuniones, la entidad empieza a mostrar las primeras señales de reactivación.
Una de las primeras acciones concretas fue la contratación del ex gerente de la división grandes empresas y corporativa de CorpBanca, Rodrigo Oyarzo, quien viene a potenciar un área que el mismo Massú se encargó de fortalecer: la gerencia comercial.
El ex CorpBanca llega a BTG Pactual con la misión de liderar el área de créditos de la entidad, una especie de «hombre clave», señalan fuentes cercanas, quienes apuntan a que el área de finanzas corporativas y administración de patrimonio está muy desarrollada, por lo que el foco de fortalecimiento de la entidad tenía que venir por el área bancaria.
A su llegada, se suma el reordenamiento del área de riesgo, la cual está siendo apoyada desde Brasil.
Si bien hasta ahora la entidad se está apoyando en su capital y los $75 mil millones que tiene en instrumentos financieros y efectivo, en los próximos meses retomarán la estrategia de crecimiento vía depósitos hasta «normalizar» su capacidad de apalancamiento. Hoy, el banco cuenta con un indicador de activos ponderados por riesgo de crédito de 124,18%, lo que da cuenta del espacio que pueden crecer sus colocaciones respecto de su capital.
Éste es, justamente, el siguiente paso. En 2015 la entidad solicitó a la SBIF la autorización para que la Administradora General de Fondos (AGF) y la corredora de bolsa pasaran a constituirse como filiales del banco, quedando éste como matriz de todos los negocios de BTG en el país. Sin embargo, el cambio de control en Brasil retrasó la reestructuración. El arresto de André Esteves -hoy libre de cargos-, involucrado en el caso de corrupción Lava Jato, llevó al ex controlador a ceder el 28% de sus acciones con derechos políticos a otros siete socios de la compañía, la cual hoy preside Persio Árida.
En diciembre de 2016, la Superintendencia autorizó el cambio en el control, por lo que la entidad retomará la reestructuración mediante una nueva solicitud al regulador. El tema no es menor. A diciembre del año pasado, el banco tenía un capital de $73.226 millones, pero al quedar las dos filiales como parte de la entidad, podrá duplicarse hasta cerca de US$200 millones, pues su control y, por tanto, su patrimonio computarán como capital del banco.
Es decir: con el capital actual, la entidad puede llegar a prestar un total de US$1.000 millones al año y tomar tickets de hasta US$20 millones en créditos con garantías y US$10 millones sin ellas. Sin embargo, con la corredora y la AGF como parte de su propiedad, los montos de los créditos se duplicarán.
En lo que va de 2017, BTG ha estado cerrando operaciones de préstamos, pero al cierre de 2016, los créditos y cuentas por cobrar del banco habían mostrado un crecimiento de 56,27%, totalizando $36.561 millones.